domingo, 15 de abril de 2012

La imagen es lenguaje

A lo largo de toda la historia, el desarrollo del hombre se ha visto acompañado del desarrollo de las imágenes. Desde las pinturas de las cavernas hasta el sin fin de medios que se nos presentan hoy en día como soportes para éstas (videos, revistas, afiches, ropa, web, etc). Sin embargo,lo que las imágenes han guardado en común es un objetivo concreto: la entregade un mensaje.
Si pensamos en los egipcios, esto se hace evidente ya que la imagen era parte importante de su lenguaje escrito. Las ilustraciones que decoraban sus paredes (en su mayoría tumbas) narraban historias completas, primordialmente relacionadas con la muerte y el viaje a la otra vida.

Escena de el libro de los muertos, h. 1285 a.C.

Si avanzamos a los retratos del siglo XVII, también podemos darnos cuenta de esto, ya que no solo se trata de reproducir la apariencia de alguien, sino que la imagen nos da cuenta de quién es dicho personaje retratado. Es más, el solo hecho de inmortalizar un ser humano evidencia la importancia de permanencia a través de la imagen, que se convierte en parte del mensaje mismo.

Autorretrato (h.1661), 114 x 94 cm., Rembrandt

Leyendo un libro que compré hace poco me encontré con la siguiente cita de André Malraux “Uno no puede crear un arte que hable a los hombres si no tiene nada que decir”. Al pensar en tener algo que decir, no creo que Malraux se refiera a grandes y trascendentales ideas, sino que más bien a ser fieles a nosotros mismos y comunicar nuestras preocupaciones, inquietudes o apreciaciones con respecto al mundo, la vida y el día a día (o al menos a mí me gusta verlo de ese modo). Por ende es algo que debemos tener en cuenta tanto al realizar imágenes como al leerlas.

Cuando creamos una imagen, creamos lenguaje. Cada elemento que integramos o dejamos fuera habla de lo que decimos, transmite una idea.
Todos tenemos algo que decir, ya que todos tenemos intereses, reflexiones, inquietudes, lo importante es que, si creamos imágenes, debemos ser conscientes de aquello que queremos decir, o al menos de aquello que estamos diciendo con las imágenes que creamos. No siempre tiene que ser un mensaje claro y directo, puede ser sugerente y ambiguo, sin embargo esto ya es parte del mensaje mismo. Por ejemplo, la publicidad es una disciplina que busca como uno de sus principales objetivos ser directa y de fácil lectura. Por su parte, las artes visuales buscan crear mensajes mucho más complejos y con variadas capas de lectura, lo que exige al espectador una mirada más cautelosa y reflexiva. El caso de la ilustración me parece particularmente interesante ya que puede pasearse por estos dos extremos, y experimentar a través del espectro intermedio. Dependiendo del propósito con que ha sido creada, la ilustración se permite jugar con el modo en que se articula el lenguaje y cómo entrega su mensaje.

No hay fórmulas o normas establecidas para articular un lenguaje visual, es nuestra tarea aprender a utilizar las herramientas de las que disponemos y, a su vez, decodificar las imágenes que los demás nos presentan.

Ilustración de Dan Lawler

2 comentarios:

  1. Un agrado leer tu blog, Lucía. Es como escuchar una de tus clases, tiene el mismo espíritu crítico, ameno y motivador.
    Sigue subiendo posts, por favor :)

    PD: quedé loco con las ilustraciones de Jake Wyatt!

    Carlos Andueza

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    1. Gracias Carlos!! Espero seguir subiendo post y que pases a darme tu crítica de letrado jaja.
      Y si, Wyatt es seco o.o

      Saludos!!

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